lunes, 29 de agosto de 2011

Anatomía de un instante

Hace más o menos una semana terminé de leer este libro de Javier Cercas, en el que disecciona el intento de Golpe de Estado del 23 de febrero de 1981 en España recién estrenada la democracia. Cercas hace un análisis sistemático de las circunstancias y los personajes que intervinieron en la asonada militar, con una cierta objetividad, aunque no elude pronunciarse o dar su opinión cuando lo considera necesario. Lo que más me ha gustado es su investigación sobre la trayectoria pública y en algunos casos privada de los personajes, el seguimiento que hace de sus actos antes y después de ese 23 de febrero con un lenguaje cuidado y una narración amena y fluida que llegó a engancharme en algunos capítulos. 
El libro contiene muchas reflexiones interesantes, apuntes históricos, mucha lógica y decisión a la hora de apuntar a los responsables del Golpe, sin escatimar posibilidades de ninguna clase. 
Una buena lectura en resumen, fruto de una investigación rigurosa y de una manera de escribir y de pensar que me agrada mucho.

jueves, 4 de agosto de 2011

Verano. Coetzee.

He terminado esta tarde de leer esta novela de J.M. Coetzee titulada Verano, al parecer continuación de otras dos novelas presuntamente autobiográficas: Infancia y Juventud que aún no he leído. 
Ya había leído otros libros de este autor al que sigo desde hace tiempo, y no me ha sorprendido demasiado el experimento narrativo que emprendió para escribir esta especie de autobiografía, en la que Coetzee inventa un joven biógrafo inglés que intenta escribir una biografía del difunto escritor Coetzee. Este biógrafo nos dice que el escritor sudafricano falleció recientemente en Australia, y mediante una serie de entrevistas a personas que le conocieron y que fueron importantes de una u otra manera en su vida, intenta trazar un perfil vital del escritor. El juego narrativo que parece fácil es extremadamente difícil por cuanto tiene que dotar de voz propia a cada una de las personas entrevistadas, al tiempo que va definiendo de soslayo y a pinceladas la personalidad del escritor famoso (esto es él mismo) durante más o menos la década de los 70 y la propia situación de la Sudáfrica del apartheid con su vida cotidiana y su peculiaridades. 
No es un libro placentero, aunque su lectura engancha bastante; el propio autor no sale demasiado bien parado de este ejercicio autobiográfico, como tampoco su país en esa época, pero está tan bien escrito que uno puede llegar a pensar que ha visitado ese lugar. 
Me han gustado en particular las reflexiones sobre la creatividad, las condiciones personales para que ésta se dé, la referencia a la no revelación de las fuentes de inspiración, y lo que parece ser un análisis de las causas del carácter huraño y solitario del propio escritor. 
Aunque es una novela abierta en el sentido de que parece ser que esta serie de novelas autobiográficas continuará, me parece un ejercicio de narración redondo, y diferente, muy diferente. Intuitivamente la he emparentado con una novela fantástica de José Saramago: El año de la muerte de Ricardo Reis, novelación de la prolongación vital durante un año de este personaje de Pessoa a su hipotética vuelta a Lisboa y pretexto para describir una Lisboa atlántica preciosa, llena de humedad y misterio, y referencias literarias.
Yo diría que esta novela de Coetzee es muy literaria, al tiempo que indaga en la psicología de sus personajes a través de las entrevistas y unos supuestos apuntes del propio escritor sobre esos años, mezclándose algunos temas tocados en sus propias novelas publicadas, con lo que parecen sentimientos del escritor extraídos de alguna capa bastante profunda de su mente. He recordado una vieja pregunta ya escuchada en algún sitio: ¿Somos la percepción que tenemos de nosotros mismos, o el reflejo que provocamos en la personas que nos rodean y que son importantes para nosotros o somos nosotros importantes para ellas?
Desde luego el experimento narrativo me ha sorprendido gratamente, como ya lo hiciera el autor en Diario de un mal año. También, aunque en esto tengo algunas dudas sobre la veracidad de los detalles, todo es menos redondo de lo que parece en la vida de este famoso escritor que debe dar bastantes palos de ciego, malviviendo en el sentido no sólo material, sino más bien en el espiritual hasta que consigue una voz propia en la escritura; salir de la mediocridad de la vida de un ser corriente a través de la escritura, de la inteligencia, y usar esa escritura como vía de escape de sí mismo, de su propia y anodina vida.